Ha sido un mes bastante duro para mí entre una cosa y otra, pero aquí me veis, intentando no dejar abandonado el blog porque sino me cuesta horrores retomarlo. Próximamente espero traeros, por mi cumpleaños al menos, un nuevo relato romántico y algunas sorpresas más que espero que os gusten.
Mi invitada de abril iba a ser, en primer lugar, una autora de romántica que al final ha tenido que dejarlo para otro mes, por lo que tuve que recurrir a Rosa, quien muy amablemente aceptó mi invitación. Ella es administradora del blog Los secretos de Hereina (nombre que usa en la red y con el que firma esta entrada) y autora de su primera novela: ¿Me esperabas? Las aventuras de Chloe. ¿Queréis conocerla un poco más? ¡Pues a leer se ha dicho! Ojalá os guste el tema del que va a hablaros.
Hola a todos, soy Rosa pero en las redes me hago llamar Hereina, os preguntareis por qué o tal vez no pero yo os cuento el motivo. Todo comenzó con la creación de mi blog, necesitaba un nombre que me identificara y encontré Hereina que significa dejarse llevar por las emociones, y me vino como anillo al dedo, porque no se vosotros, pero no hay quien me gane a dejarme llevar por mis emociones, unas veces para mal y otras para bastante bien.
Quería dar las gracias a Rocío por cederme un trocito de mí en su blog, me ha dado carta blanca para que cuente lo que quiera, pero ya que la temática va de romántica no me ire mucho por las ramas, así que os comentare un poco mi trayectoria hasta conseguir llegar a donde estoy.
Todo comenzó el año pasado tras dar a luz a mi pequeña Daniela, la gente se sorprende, pero si, pude comenzar a escribir gracias a ella. Con ella no es que me cambiara la vida, sino que me cambio el chip y pensé, estoy cumpliendo objetivos en mi vida pero no estoy realmente feliz, mi pequeña lo es todo y sentía que debía cambiar algo en mi vida para poder disfrutar de ella como se merecía, ella fue la que me impulso a escribir y a cumplir un sueño inalcanzable para mí, “ser escritora”.
Al cabo de cinco meses tenía la novela escrita “¿Me esperabas? Las aventuras de Chloe” la satisfacción de verle el “final” no sé cómo describirla, fueron meses duros para mi familia porque tenía que sacrificar tiempo con ellos, pero debía seguir. Una vez acabada pensé… ¿y ahora qué? La deje en un cajón sin saber si quería publicarla o no, no me quería enfrentar a las críticas.
En enero me decidí con una editorial de autoedición, y en febrero salió a la venta, estaba nerviosa, ilusionada, asustada, un cumulo de emociones, hasta que al fin iban saliendo las primeras reseñas, ver que realmente le gustaba a los lectores fue lo que más me emocionó, leer nuevas reseñas es como la primera vez, me emociono. Me encanta esa sensación.
Pero ahí no acaba el trabajo de escritor, poco a poco voy descubriendo que un escritor tiene que saber marketing, diseñar, copywriting…madre mía no acabaría con todo lo que hay que aprender, porque no es escribir y listo, no se vende sola una obra, necesita mucho esfuerzo y trabajo por parte del autor y eso quizás para muchos sea lo más pesado de seguir insistiendo.
Así que mi gran mensaje es “si tienes un sueño ve tras él, no lo dejes porque se complique, sube poco a poco los peldaños hasta llegar al objetivo”
Mírame a mí, madre, trabajo por cuenta ajena, mantengo mi blog activo y escribo, con todo lo que conlleva vender tu obra después, a no ser que seas un famosísimo y tu obra se venda sola, pero como no es el caso seguiré luchando porque así sea y aprendiendo más y más, al final tendré titulaciones de todo tipo, pero podre decir que he cumplido mi sueño. ¿y tú, comenzaras a ir tras tu sueño?